Cómo detectar una fuga en el drenaje

Las fugas en el drenaje son uno de los problemas de plomería más comunes y complicados que enfrentan los propietarios de viviendas. Si no se detectan a tiempo, pueden causar daños estructurales, promover el crecimiento de moho y generar reparaciones costosas. Detectar a tiempo estas fugas es clave para prevenir problemas mayores.


Señales comunes de una fuga en el drenaje

Olores desagradables

Un olor persistente cerca de los drenajes o en tu hogar podría indicar una fuga en el sistema de desagüe. Las fugas de aguas residuales pueden liberar gases que producen olores desagradables.

Manchas de agua o decoloración

Revisa si hay manchas de agua o decoloración en paredes, techos o pisos. Las fugas en los drenajes pueden provocar que la humedad se filtre en las áreas circundantes, dejando marcas visibles.

Crecimiento de moho o hongos

El exceso de humedad causado por una fuga crea el ambiente perfecto para el moho y los hongos. Busca parches negros, verdes o blancos cerca de las tuberías, debajo de los lavabos o en los sótanos.

Aumento inexplicable en la factura del agua

Si no has cambiado tu consumo de agua pero tus facturas son más altas, puede que haya una fuga oculta.

Drenajes lentos o atascos frecuentes

Un drenaje dañado puede interrumpir el flujo de agua, causando obstrucciones o drenajes lentos en lavabos, tinas o duchas.

Pisos deformados o pintura con burbuja

El exceso de humedad puede hacer que los pisos de madera se deformen o que la pintura forme burbujas y se desprenda.

Zonas húmedas en el jardín

Si las tuberías de drenaje exteriores tienen fugas, es posible que notes áreas húmedas o césped inusualmente verde en ciertas partes del jardín.


Pasos para detectar una fuga en el drenaje

Inspecciona las tuberías visibles

Examina debajo de los lavabos, alrededor de los inodoros y en sótanos o espacios de acceso para encontrar señales de acumulación de agua, corrosión o grietas.

Realiza una prueba de agua

  • Llena el drenaje: tapa el drenaje sospechoso y llena el lavabo o la tina con agua.
  • Busca fugas: observa el área debajo del drenaje para detectar goteos o humedad.
  • Prueba con colorante alimenticio: agrega unas gotas de colorante al agua. Si el agua coloreada se filtra, la fuga está confirmada.

Usa un medidor de humedad

Un medidor de humedad puede ayudarte a detectar fugas ocultas midiendo el contenido de agua en paredes, pisos y techos.

Escucha los sonidos

Apaga todos los electrodomésticos y escucha si hay goteos o ruidos de burbujeo cerca de los drenajes.

Inspecciona el jardín

Busca charcos de agua o vegetación inusualmente exuberante cerca de tuberías enterradas. Esto podría indicar una fuga en el drenaje subterráneo.

Monitorea el medidor de agua

  • Paso 1: apaga todas las fuentes de agua en tu hogar.
  • Paso 2: revisa la lectura del medidor de agua y anota el número.
  • Paso 3: espera 1-2 horas sin usar agua y verifica nuevamente el medidor. Si la lectura cambia, es probable que haya una fuga.

Contrata a un plomero profesional

Si sospechas una fuga pero no puedes localizarla, un plomero profesional puede realizar diagnósticos avanzados como:

  • Inspección con cámara: insertar una cámara pequeña en el drenaje para identificar fugas o daños.
  • Pruebas de presión: verificar la presión del sistema para localizar fugas.


Cómo prevenir fugas en el drenaje

Mantenimiento regular

Programa inspecciones de plomería de manera rutinaria para identificar y solucionar pequeños problemas antes de que se conviertan en grandes.

Evita químicos agresivos

Los limpiadores de drenajes comerciales pueden corroer las tuberías con el tiempo. Usa alternativas naturales o consulta a un plomero para obstrucciones persistentes.

Protege los drenajes

Utiliza rejillas para atrapar residuos y prevenir bloqueos que puedan generar fugas.

Monitorea la presión del agua

La presión de agua alta puede poner tensión en las tuberías y causar fugas. Instala un regulador de presión si es necesario.

Aísla las tuberías

Protege las tuberías contra el congelamiento durante los meses fríos para evitar grietas y fugas.